Editorial Sonámbulos, 2023

Escala, antología poética 1991-2023

Escala porque cada libro es un hito del viaje. De los primeros, apenas queda un relámpago. Ni siquiera una tormenta. Aunque aquella lluvia alimentase raíces desconocidas por entonces

Escala porque esta antología encuadra, a determinado tamaño, una parte de lo que se escribió. Y de esa parte, otra de lo que se publicó. Como en un mapa se señalan ciertos accidentes geográficos de un vasto territorio ignorado. O, mejor aún, como en un plano geográfico se inscriben arroyos y fuentes, y permanecen invisibles los veneros subterráneos, origen de lo visible.

Escala musical. Porque los poemas son construcciones musicales que usan la palabra para unir la misteriosa fluencia de imágenes, pensamientos e intuiciones que se amalgama en el verso, obedeciendo a ritmos internos que suenan de determinada manera según los estados de ánimo y de conciencia, domados a posteriori por el arte poética. Aunque algunos nunca se han dejado domar.

Y «secreta escala» también, en palabras de San Juan de la Cruz. Cada libro un peldaño de conciencia. Cada poema un ascendido descendido. Quien sube, baja al nivel de sus ojos lo que estaba arriba. Aunque la dirección no importa tanto. Quien baja, sube al nivel de sus ojos lo que estaba abajo. Lo que importa es traer a la forma de la palabra lo que todavía no se había descubierto o expresado en uno. En cualquier ámbito de los mundos externos o internos, intercomunicados por la infinita variación de un ritmo inaudible. Aunque la poesía sí es capaz de oírlo. Oírlo y darle voz. Ese es su pequeño y maravilloso poder.